He de confesar que de pequeño, esta viñeta me pareció muy acogedora así que el síndrome del acumulador, diógenes o del doctor Infierno, ya estaba muy arraigado en mi personalidad por aquel entonces. Me acuerdo perfectamente de la historia, Gastón se pone a arreglar el archivo o biblioteca del trabajo y termina así. Y al final no he conseguido arreglar nada, simplemente he movido cosas de un sitio para otro. Bueno, he rescatado un tocho de cómics de los cuatro fantásticos que estaban por ahí desperdigados, y ahora tengo más fácil unir todos los cómics del supergrupo... pero a parte de eso me temo que no he puesto demasiado orden en el caos del antro. Hasta otros acumuladores que conozco me dicen que tengo que controlarme, como decía Yoda, control, control hay que practicar el control... Bueno, ya veremos si otro finde puedo arreglar por fin el antro. Me temo que la solución pasa por deshacerse de material. Así que ya saben, si vuelvo a desaparecer, que me busquen en el antro.
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